| ¡Buenos días! Espero que empieces la semana con muchas ganas. Vamos a ello.
El sueño de una Constitución nacida de una asamblea ajena a los cauces oficiales de la política chilena se ha estrellado. Estaba llamada a enterrar la de tiempos de Pinochet, que sigue vigente, y surgió como respuesta a la gigantesca movilización estudiantil que se produjo en el país en 2019. Pero el texto ha chocado con las urnas: el 61,87% de los chilenos lo han rechazado, frente al 38,13% que ha votado sí. El texto frustrado incluía aspectos innovadores como la paridad de género, la ecología o el reconocimiento de los pueblos indígenas. Pero la confianza se fue apagando a medida que surgieron polémicas y muchos vieron peligrar su estatus quo. Cuestiones como la declaración de Chile como un estado plurinacional, el fin del Senado o el papel que recibían los indígenas la han hecho descarrilar. El presidente Boric ha llamado a la "unidad nacional de todos los sectores" para garantizar que el cambio no se parará y deberá buscar nuevas vías para encarrilarlo. Pero la ruptura entre la calle y la política y la dificultad de encauzar las aspiraciones de todos quedará como un frustrante episodio de intento de innovación. España: Sin mayorías a la vista Arranca el curso y con él la pelea a cara de perro entre los partidos para posicionarse ante las elecciones municipales y autonómicas de mayo y las generales de final de año. En un curso además marcado por la terrible inflación y la guerra. Pedro Sánchez intenta tomar la iniciativa: recibe hoy en La Moncloa a 50 ciudadanos seleccionados entre los que le han escrito en los últimos años en un acto para intentar acercarse a la población. Y además debatirá mañana en el Senado con Feijóo, en un cara a cara donde se juega bastante. Pero las encuestas están en su contra. El PP de Feijóo sigue al frente de las intenciones de voto, según recoge el barómetro de 40dB para EL PAÍS y la Cadena SER. Estos son los datos: - El PP lograría el 27,9% de los votos, casi 7 puntos más que en las elecciones de 2019 y 1,5% más que el PSOE. Parecido a julio. El efecto Feijóo que impulsó al partido tras la salida de Casado ya se ha estabilizado. Si desde marzo crecía entre uno y dos puntos mensuales, desde julio solo ha crecido un 0,4%.
- El PSOE lograría 26,4%, casi dos puntos menos que en 2019. Sufre fugas hacia el PP (5,8%) y no logra frenar la desmovilización.
- Unidas Podemos cae al 11,9%, 1,1 puntos menos que en 2019.
- Vox encadena su quinta bajada y ya tendría menos votos que los que logró en las elecciones de 2019. Perdería cinco escaños para colocarse en 47. De Ciudadanos, ni hablamos.
El resultado: la forja de una mayoría a derecha o izquierda sería hoy más difícil aún que en anteriores sondeos. La de derechas sumaría 171 en el mejor de los casos. ¿Y qué nos preocupa? La inflación es la primera preocupación para los españoles. La dependencia energética, la segunda. Y el paro, habitual primera preocupación, ha caído a la tercera. Las medidas decretadas por el gobierno para apagar escaparates o limitar el aire acondicionado reciben un apoyo general en todos los partidos. Cambio climático visto por la derecha y la izquierda Belén Barreiro analiza la gran preocupación que despierta el cambio climático: ha pasado del 46% de inquietud al 54% en pocas semanas. Pero la ideología sigue marcando la mirada: más de 6 de cada 10 votantes del PSOE y UP lo consideran muy importante, frente a los 4 del PP y los 3 de Vox. A los de Vox les preocupa más la inmigración. Hoy sabremos quién sucederá a Johnson Esta mañana sabremos a quién han elegido los afiliados conservadores para suceder a Boris Johnson. Las encuestas apuntan a Liz Truss, ministra de Exteriores, con un discurso más optimista y difuso que el de Rishi Sunak, portavoz de un mayor rigor económico, según nos cuenta aquí Rafa de Miguel. Tras su vista a la Reina, mañana por la tarde la nueva o nuevo premier pronunciará su primer discurso como tal. Más difícil será gobernar un país en el que se ha disparado la inflación y se multiplican los problemas de energía y empleo a gran escala. Alemania quiere pasar la factura a las energéticas Alemania quiere cargar a las empresas de energía parte del coste del nuevo paquete de ayudas para aliviar a sus ciudadanos ante el invierno. El tripartito de socialdemócratas, verdes y liberales ha acordado un paquete de 65.000 millones que irá a parar a prestaciones por hijos, a jubilados, estudiantes y transporte público. Scholz se propone gravar los beneficios extra de las energéticas, como han hecho al menos España, Italia y Reino Unido. Pink contra Floyd He aquí una pelea que ahora se traslada a la guerra y que nos cuenta Ricardo de Querol. David Gilmour, guitarrista, cantante y líder de Pink Floyd en la última etapa, canta a la lucha de Ucrania mientras Roger Waters, quien estuvo al frente desde 1968, culpa a la OTAN. De fondo hay más cosas: una gran operación financiera para vender sus canciones por cerca de 500 millones. En pocas palabras: Y varias recomendaciones: Gracias a todos y todas. Por leerme y escribirme a elpaisdelamanana@elpais.es ¿Dónde apuntarse para recibir esta newsletter? Aquí. ¡Feliz fin de semana! Berna González Harbour | 
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