François Ozon sabe de comedias

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Viernes, 5 de mayo de 2023

François Ozon sabe de comedias

Gregorio Belinchón

François Ozon sabe de comedias

Hola a todos:

A sus 55 años, el francés François Ozon tiene poco demostrar. Le cuesta mucho vivir sin trabajar, y como lo suyo es dirigir cine, no para de estrenar. De ahí su inmensa filmografía, de ahí su variedad de géneros, de ahí su ductilidad y la posibilidad que ha disfrutado de hacer películas más de autor y otras más abiertas y pensadas para el gran público. Y a esta vertiente pertenece Mi crimen, un vodevil datado en los años treinta, que le permite reírse de los hombres, vindicar la inteligencia de las mujeres y hablar de un protoMeToo en un París teatral (por cómo se comportan los seres humanos y por el ecosistema en el que se mueven los protagonistas). Como muy bien apunta Elsa Fernández-Santos en su crítica de esta comedia que se estrena hoy, Mi crimen conformaría una trilogia con Potiche. Mujeres al poder (2011), y 8 mujeres (2002). En Francia ha sido un éxito: lo dicho, Ozon sabe jugar en diversas categorías.

A mñi me interesa más otro Ozon, el de Bajo la arena, Mi refugio, Frantz, En la casa (Concha de Oro de San Sebastián basándose en una obra de Juan Mayorga), Gracias a dios, Joven y bonita, Verano del 85 o Peter von Kant (fusion de esta línea autoral con otra mucho más queer, otra rama fílmica a la que Ozon ha aportado numerosos trabajos). Con todo, charlar con el francés siempre es interesante, y si le pillas de buenas, fascinante. En el pasado festival BCN presentó Mi crimen, y allí me contó cosas curiosas. Para él, "la comedia es placer", y esa es la única regla que comanda ese género. Y tras unas películas sombrías, "y unos años históricamente sombríos, con el confinamiento y la guerra actual, mi cuerpo me pedía reír".

Desde la izquierda, Rebecca Marder, Isabelle Huppert y Nadia Tereszkiewicz. en 'Mi crimen'.

Desde la izquierda, Rebecca Marder, Isabelle Huppert y Nadia Tereszkiewicz. en 'Mi crimen'.

El cineasta rechaza que a veces no piense en el público, "porque yo soy mi primer espectador". A los años treinta de su película le empujó la obra de teatro en la que se basa, y por tanto, su inmersión en la screwball comedy. "A mí me gustan sobre todo las comedias... en las que no te ríes a la primera. Comedias con vericuetos, con cajones que te llevan a otros cajones que te provocan la risa". Algo que contradice con el personaje de Isabelle Huppert, que provoca tal cual aparece la risa. "Es que la comedia no es una ciencia exacta. Y Huppert va genialmente a su ritmo. En realidad, la comedia es más complicada que el drama. Porque si no te ríes con la primera, es un fiasco. Sin embargo, en todo drama siempre habrá momentos emocionantes".

"No tengo la ciencia de Billy Wilder", confiesa sonriendo, sobre el famoso truco de las maracas de Jack Lemmon en Con faldas y a lo loco (al tocarlas, le daba tiempo al público a reír, y así las réplicas se pueden escuchar), y que Ozon usa en algún momento de Mi crimen. "Creo en que en los ensayos te tienes que reír, en el rodaje debe haber seriedad, y en el montaje decantar y elegir. Fundamental para la comedia: en cuanto tengas un primer montaje, proyéctalo a amigos. Así podrás pulir y remontar". Y finalmente, Ozon asegura que todas sus comedias están protagonizadas por mujeres, algo de lo que se dio cuenta en el estreno de Mi crimen, porque para él "una mujer seductora es innatamente inteligente y divertida, lo que conforma una gran protagonista".

La huelga de guionistas, a toda máquina

Esta huelga va a ser una batalla muy larga, con muchas semanas por delante, avisan los analistas de los medios estadounidenses. Y los guionistas esperan nuevos aliados. El próximo 10 de mayo comienzan las negociaciones para renovar el convenio de los directores (que se acaba el 30 de junio). Los guionistas saben que cuando se sume este segundo grupo conformarán un ejército casi imparable (por esta futura negociación los directores no se han asomado a las manifestaciones). En las teles estadounidenses ya se ha notado este parón, y comienzan a reagendarse las grabaciones de algunas series y algunas películas han visto reprogramados sus rodajes. A Los anillos del poder le ha pillado a tres semanas de acabar de grabar su segunda temporada, y se está haciendo sin sus creadores, productores ejecutivos ni showrunners en el plató. Y no llevamos ni una semana de paro.

La guionista Olivia Dom, en una de las manifestaciones ante los estudios Universal ayer jueves 4, día de Star Wars (de ahí el lema de la pancarta).

La guionista Olivia Dom, en una de las manifestaciones ante los estudios Universal ayer jueves 4, día de Star Wars (de ahí el lema de la pancarta). / Marcio Jose Sanchez (AP)

¿En qué lo va a notar el espectador de fuera de EE UU? En que el año que viene algunas de esas series tendrán menos episodios, y en que algunas películas se estrenarán más tarde de lo esperado. Los jefazos de los estudios (Ted Sarandos, de Netflix; David Zaslav, de Warner Bros. Discovery, o Bob Bakish, de Paramount) llaman a la calma de los consumidores: lo veían venir y tienen los almacenes llenos de contenido audiovisual fresco. "Incluso si la huelga se alarga durante meses", advierte Bakish. Es tan cierto como que es el típico mensaje lanzado en plena negociación para enfriar los ánimos de la otra parte.

Un miembro de un piquete de los guionistas a las puertas de Amazon Studios en Culver City (California) el pasado martes 3.

Un miembro de un piquete de los guionistas a las puertas de Amazon Studios en Culver City (California) el pasado martes 3. / Frederic J. BROWN (AFP)

Muchos de quienes leéis este boletín, también estaréis suscritos al de Televisión, pero, por si acaso, aquí os enlazo el análisis de la situación que ayer realizó Natalia Marcos. De las últimas noticias que tenemos sobre el tema, destaca que Drew Barrymore ha decidido renunciar a presentar este domingo los premios MTV de cine y televisión (la organización había anunciado previamente que no habría alfombra roja) en solidaridad con los guionistas. Se celebrará la gala, aunque sin maestro de ceremonias

Dalton Trumbo, en su oficina favorita, su bañera.

Dalton Trumbo, en su oficina favorita, su bañera.

Y Boyero habla aquí de los guionistas clásicos que a él le gustan. Prefiere directores con sello, pero recuerda nombres como los de William Goldman, Dalton Trumbo o I. A. L. Diamond.

Silvia Munt, y el aborto en tiempos de la Transición

Silvia Munt también abortó de joven, cuando no existía la posibilidad de hacerlo legalmente en España (de cómo está legislado este derecho de la mujer en la actualidad... mejor me meto otro día). Para suerte suya, pudo viajar a Londres. Aquellos recuerdos han devenido en los cimientos de Las buenas compañías, película que se estrena hoy en cines, y que recupera para el cine de ficción a esta actriz y directora de teatro y documentales. Pude charlar con la doble ganadora del Goya sobre el aborto en el posfranquismo de la Transición, sobre manipulaciones y borrados de la historia (a cuenta del hecho histórico real, el juicio a las Once de Basauri, que fueron detenidas en 1976 por su relación con abortos clandestinos, y que sirve como motor emocional de las dos protagonistas de su filme)...

Silvia Munt, esta semana en Barcelona.

Silvia Munt, esta semana en Barcelona. / Kike Rincón

Mientras hablábamos, fui consciente de la profundidad de la charla, pero al transcribir la entrevista descubrí cómo había abierto su alma en frases como: "Ahora no nos acordamos, pero entonces todo era pecado y secreto, culpabilidad eterna para la mujer. Todas lo sufrimos", "A nuestras madres les habían enseñado a callar. Y a nosotras nos movía la rabia"; "En el machismo del día a día, no hay grandes diferencias entre izquierdas y derechas", o "Mientras el hombre no digiera el empacho que ha tenido por sentirse el centro del mundo, mientras no asuma que esto no es así, seguirá nuestro sufrimiento". Muchas gracias a Silvia Munt. Aquí, la entrevista íntegra. Y aquí, la crítica del filme, de Javier Ocaña.

Lo que estoy leyendo: Alice Guy, una cineasta pionera

No hay directora igual a Alice Guy o Alice Guy Blaché, en su firma de casada. En EL PAÍS ya le hemos dedicado varias historias por dos razones: porque fue una de las precursoras del cine moderno (más allá de que, como mujer, fuera la primera directora), una creadora imaginativa y resuelta que se enfrentó al machismo de la época, y porque su huella se borró de la Historia del cine por culpa del patriarcado imperante. Justo venimos de hablar de eso con Las buenas compañías, y no abandonamos esta manipulación machista. Cuando en 1930 Léon Gaumont, fundador de la mítica productora francesa, publicó la historia de su empresa, decidió iniciarla en 1907 y así ninguneó a aquella secretaria que llegó a ser responsable del 80% del negocio de su compañía. Además de los libros y las obras de teatro que han recuperado poco a poco su figura (al realizar su carrera tanto en Francia como en EE UU ha dejado huella en las dos cinematografías), ahora se publica el cómic Alice Guy (Salamandra Graphic), de Catel Muller y José-Louis Bocquet (firman como Catel & Bouquet), que repiten el esquema que realizaron en Kiki de Montparnasse o Josephine Baker.

Alice Guy, dirigiendo.

Alice Guy, dirigiendo.

Por eso, quien conozca la carrera de Guy no encontrará nada nuevo, pero es que estas novelas gráficas están más bien centradas en su carácter divulgativo, en descubrir a sus lectores a esas artistas pioneras en sus campos y olvidadas o borradas. Y Alice Guy merece que coreemos su nombre constantemente.

Una de las viñetas de 'Alice Guy'.

Una de las viñetas de 'Alice Guy'.

Vamos con otros temas.

El drama de los cineastas iraníes. Jafar Panahi ha salido de Irán, tras 14 años de prohibición. Lo único que supimos al principio fue a través de una foto en el Instagram de su esposa en donde se ve al matrimonio saliendo de la sala de equipajes de un aeropuerto desconocido (parecía francés) con un carrito con varias maletas grandes. Debajo, esta frase: "Después de 14 años, la prohibición de Jafar ha sido cancelada y finalmente estamos viajando juntos unos pocos días". Habían ido a Francia a ver a su hija y ya han vuelto a Teherán. En cambio, las autoridades iraníes no han dejado viajar a Mohammad Rasoulof, Oso de Oro con La vida de los demás, a quien la organización del festival de Cannes había invitado a formar parte del jurado de la sección Una cierta mirada. Tras siete meses en la cárcel, Rasoulof fue liberado en febrero por su precario estado de salud. Él no ha recibido el permiso pertinente.

Omar Sy, de visita en Barcelona. El popular intérprete de Intocable fue a Barcelona, al BCN Film Fest, a recoger uno de los premios de honor y a presentar Padre y soldado, que de paso le reportó un segundo galardón, el de mejor interpretación masculina. No se metió en ningún charco verbal (ha aprendido a controlarse) y a Jacinto Antón le explicó, por ejemplo, sobre la situación en Francia y los disturbios contra Macron: "Lo que ocurre en Francia es la confirmación de la libertad que hay en el país". Aquí tenéis la entrevista completa.

James Gunn, el rey de todo el cotarro. Mi compañero Tommaso Koch se fue a París a entrevistar a James Gunn, que hoy estrena el cierre de la trilogía Guardianes de la Galaxia, un producto Marvel, mientras dirige ya a pleno rendimiento la división DC de películas, series y videojuegos. "Mi situación en DC no tiene precedentes, porque nunca ha habido un narrador como director ejecutivo de los estudios. Ningún ser humano en la historia de Hollywood ha tenido una oportunidad, como la que me espera, de contar la mayor historia jamás contada a través de cine, televisión y juegos y disponer de esos medios creativos. ¿Cómo demonios iba a decir que no?", le cuenta Gunn a Tommaso en esta estupenda entrevista.

El cine africano. Estos días se está celebrando en Tarifa la 20ª edición del festival de cine africano, una cita muy interesante, en la que sé que el equipo organizativo se deja el alma y la hacen con el mayor de los cariños, y en la que ha estado la nueva directora de Planeta Futuro, Ana Carbajosa. Entre sius varios reportajes, destaca este, centrado en la doble batalla de los cineastas de ese continente, que luchan por la restitución física y el acceso al material de archivo de creadores de generaciones precedentes, y además por poder contar ellos mismos sus historias, no a través de los ojos de los extranjeros, impulso al que llaman la "reapropiación" de la narrativa. Aquí tenéis la historia completa.

Imagen de Baron Thierno Souleymane Diallo en su largometraje 'Au cimetière de la pellicule', en el que busca en París la obra de un director africano.

Imagen de Baron Thierno Souleymane Diallo en su largometraje 'Au cimetière de la pellicule', en el que busca en París la obra de un director africano.

Cuatro de mayo, día de Star Wars. Ayer, en el mundo anglosajón, se celebró el día de Star Wars, por la similitud de sonidos entre "May the Force be with you" (que la Fuerza te acompañe) y "May the Fourth" (4 de mayo). Por cierto, un lector apuntaba con buen criterio la mala traducción de May the Force be with you, que lo correcto hubiera sido "Que la fuerza sea contigo" y así se mantendría "el carácter religioso de la orden Jedi". Bueno, al grano. Que ayer en Disney + estrenaron el segundo recopilatorio Visions, con cortos de animación de todo el mundo (la primera entrega eran solo japoneses), y que es llamativa la gran calidad de la aportación española, Sith, de Rodrigo Blaas. Aquí os dejo un reportaje sobre este cortometraje.

Cerrada la newsletter, Venecia anuncia que el cineasta estadounidense Damien Chazelle presidirá el jurado de su sección Oficial.

Estrenos de la semana

Como ya hemos hablado de Las buenas compañías y de Mi crimen, solo nos queda comentar otra película interesante, The Lost King.

THE LOST KING. Stephen Frears

Sally Hawkins y Harry Lloyd (el Ricardo III que imagina la protagonista), en 'The Lost King'.

Sally Hawkins y Harry Lloyd (el Ricardo III que imagina la protagonista), en 'The Lost King'.

Javier Ocaña apunta sobre este estupendo filme de Stephen Frears sobre la leyenda negra que rodea a Ricardo III (culpa de Shakespeare, cierto, pero también de malos historiadores): "Una película a pie de calle, ambientada en interiores cotidianos —reuniones de despacho, conversaciones de pub, desayunos en el hogar—, que en realidad esconde un extraordinario relato sobre la ilusión, el ímpetu y la conmoción". Podéis leer la crítica aquí.

¡Hola, mamá!

¡Hola, mamá!

Hasta el viernes que viene, y felicidades a las madres, que el capitalismo ha decidido que el domingo es su día. Los otros 364... Dejo aquí un retrato de la mía, que le gusta cantar tarantellas.

Antes de despedirme, insisto en el recordatorio: en EL PAÍS hemos conformado un equipo de investigación sobre el abuso y el acoso sexual en el cine español. Si lo has sufrido o conoces a alguien que lo haya sufrido, Elena Reina (ereina@elpais.es), Ana Marcos (amarcos@elpais.es) y yo mismo (gbelinchon@elpais.es) estamos para escucharte.

En Twitter, para cualquier consulta, soy @gbelinchon

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Sobre la firma
Gregorio Belinchón

Gregorio Belinchón

Es redactor de la sección de Cultura, especializado en cine. En el diario trabajó antes en Babelia, El Espectador y Tentaciones. Empezó en radios locales de Madrid, y ha colaborado en diversas publicaciones cinematográficas como Cinemanía o Academia. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster en Relaciones Internacionales.

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