Las novedades, las noticias y las críticas de los programas y series de televisión ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏ ͏
| | | La parrilla está loca, loca, loca | NATALIA MARCOS | | Una imagen del concurso de La 1 'Baila como puedas'. | | | | |
A veces uno se pregunta si lo que querrán las cadenas no será en realidad que la gente no vea sus programas. Si no, hay cosas que no se entienden. Empecemos por el miércoles 10 de abril, cuando La 1 estrenó la serie Operación Barrio Inglés. Obtuvo un mal dato de audiencia, un 5,8% de cuota y solo 634.000 espectadores. Saltamos al siguiente miércoles, día 17 de abril. La 1 levantó de la programación la serie ante el doble estreno que programaron en las cadenas privadas: Factor X regresaba a la televisión en Telecinco y el concurso El 1% se estrenaba en Antena 3. El primero también fue mal en audiencias: 8,3% de cuota y unos escasos 670.000 espectadores. Mejor le fue a El 1%, con 1,5 millones de espectadores y un 15,5% de cuota. Este miércoles, día 24, de todos estos estrenos ya solo ha resistido en el miércoles El 1%. ¿Qué se ha encontrado enfrente? En La 1, otra vez MasterChef, que esta semana, sin venir a cuento, ha doblado su emisión (lunes y miércoles). Y en Telecinco, el programa de Supervivientes que habitualmente se emite los martes se ha emitido el miércoles. También sin venir a cuento. ¿Qué ha pasado con Operación Barrio Inglés y con Factor X? La serie de La 1 volverá con su segundo y tercer capítulo el domingo 28. Es decir, casi tres semanas después de emitir el primer episodio, la cadena espera que sus espectadores se enganchen a una serie de cuya existencia ya se han olvidado y que vean dos capítulos seguidos. Un plan sin fisuras. En cuanto a Factor X, Telecinco lo ha recolocado en la noche de los martes, y ha tenido un dato algo inferior al del estreno: 7,7% y 541.000 espectadores. | | | | | | |
| | Aria Bedmar y Rubén Cortada, en la serie 'Operación Barrio Inglés'. / TVE | | | |
Otro programa que ha bailado, valga la redundancia, por la programación desde que se estrenó es Baila como puedas. El concurso de La 1 (alguien me tiene que explicar aún por qué han decidido emitirlo casi al mismo tiempo que Bailando con las estrellas en Telecinco) no ha ido bien de audiencias, y eso se ha traducido en un movimiento constante en la parrilla televisiva. Comenzó con mal pie el lunes 11 de marzo, con un 7,1% de cuota y poco más de 500.000 espectadores. En su tercera semana pasó a la noche del martes. En la cuarta, TVE reorganizó su prime time para el estreno de MasterChef y el concurso de baile pasó al miércoles. El miércoles 10 de abril se programó después de Operación Barrio Inglés. La semana siguiente ya arrancó a las 00.20. Ninguno de los cambios logró remontar las cifras, siempre fue hacia abajo salvo un ligero repunte con el primer movimiento. Ahora, la nueva fase del programa se emitirá los domingos por la tarde, a partir de las 17.50. En resumen, quienes empezaran a ver Factor X u Operación Barrio Inglés o estén siguiendo MasterChef, Baila como puedas o incluso Supervivientes, más les vale estar atentos para seguir la pista de sus programas. Además, la actual ley audiovisual permite que estos cambios se hagan en cualquier momento: antes las cadenas estaban obligadas a anunciarlos con tres días de antelación para no ser multadas; ahora ya no hay margen obligatorio. Estos movimientos han ocurrido siempre y seguirán haciéndose. Es normal que, cuando un programa no funciona en audiencias, se intente reflotar cambiándolo a otro hueco donde pueda encajar mejor. No siempre se acierta en el día y hora de emisión o en ocasiones es preferible enfrentarlo a otros contenidos. Pero tampoco se puede negar que es cada vez más difícil ver la televisión tradicional si uno no sabe si cuando encienda el aparato se va a encontrar ahí lo que quiere ver o no.
A mi alrededor es habitual que escuche a gente afirmar taxativamente que ya nadie ve la televisión de toda la vida, que nadie hace ya eso de ver un programa en el día y hora que está programado. Mucha gente está convencida de que ya todo se ve en plataformas o a la carta. No es verdad. Yo misma sigo viendo bastante televisión tradicional. Todavía tiene un público fiel, no hay más que ver la audiencia cada día de El hormiguero, Pasapalabra o La ruleta de la suerte. | | | | | | |
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2023 fue el año en el que menos minutos de televisión tradicional vimos en España desde que hay registros de audiencia. Si se suma la audiencia lineal (el consumo que se hace a el día y la hora a la que se programa un contenido) y en diferido (el que se hace en los siete siguientes días de esos mismos programas), en 2023 cada persona vio en España una media de 181 minutos diarios de televisión. Es el dato más bajo histórico, y aun así son tres horas de televisión al día, nada mal. Si esas personas de las que hablaba de mi entorno no ven ningún minuto, eso significa que hay otras que ven seis o más horas. El mes pasado, la media fue de 182 minutos de televisión diarios. Aún hay gente que ve la televisión como siempre se ha hecho, pero las cadenas están haciendo grandes esfuerzos para que ese público sea cada vez menor. | | | | | Lo que estoy viendo | | | Richard Gadd como Donny y Jessica Gunning como Martha, en 'Mi reno de peluche'. / ED MILLER (NETFLIX) | Ya os dije la semana pasada que el mundo seriéfilo andaba revolucionado con Mi reno de peluche (Netflix), y había motivos para ello. Empecé con curiosidad y me gustó la forma en que está narrada. Intriga tratar de entender qué está pasando y por qué el protagonista reacciona al acoso como lo hace. Pero entonces llegas al cuarto episodio y te encuentras de bruces con una historia angustiosa, terrible, contada de una forma cruda y desagradable. Tan impactante que tienes que seguir y, al mismo tiempo, tienes la sensación de que no vas a poder dormir sin pesadillas nunca más. Todo tiene un tinte más oscuro aún cuando sabes que está basado en la historia real de su creador, que también interpreta al protagonista, y que contó sus traumas en un monólogo teatral (dos, en realidad, aunque la serie adapta el último de ellos). Es decir, que el hombre lleva años reviviendo con gran intensidad el trauma que le ha marcado de por vida. No hay duda de que es una de las series de lo que va de año, y que nos la habríamos perdido si no fuera por la recomendación de boca en boca, porque va en contra de todo algoritmo posible. Tampoco es una serie para todos los públicos, ni mucho menos. Aquí os hablo de todo esto y cuento detalles tanto del argumento como de la historia real. Sent from my iPhone.
De los estrenos de la semana, he visto ya los seis episodios de El caso Asunta (viernes 26 en Netflix). Más allá de la espectacular caracterización de los protagonistas (Tristán Ulloa está escalofriante y genial como Alfonso Basterra; Candela Peña también está bien porque su personaje es muy extremo, pero creo que Ulloa está varios escalones por encima). Me ha gustado la forma de contar la historia, aunque como decía en X Laia Portaceli, quizá se echa de menos ver cómo era esa familia antes de todo esto. Se agradece el esfuerzo por mostrar las dudas que hay sobre lo que ocurrió y las motivaciones que había detrás, y también cómo el juicio popular y la opinión mediática pudieron influir en el juicio real. La serie se ve rápido, es adictiva y está bien contada e interpretada.
Y, ¿ahora que ha terminado Shōgun(Disney+), qué hacemos? Necesito más seppukus, saber qué pasa con Blackthorne, cómo le va en la guerra a Toranaga. Y al mismo tiempo, no hace falta segunda temporada para nada. Qué disfrute de serie.
Por cierto, como no tengo sección Lo que estoy escuchando, os lo cuento aquí. He empezado el podcast del sindicato español de guionistas, ALMA. Se llama Esto ya se ha hecho y es la mar de interesante. Escuchar a los guionistas siempre es interesante, y aquí salen muchos temas que nos atañen a quienes escribimos de televisión y que deberían interesar a quienes les gusta la televisión. | | | | Zapeo de noticias | | | El periodista Carles Porta. / MASSIMILIANO MINOCRI | Os traigo un par de historias relacionadas con la televisión publicadas en EL PAÍS pero fuera de la sección de Televisión. Enlazando con El caso Asunta, interesante esta reflexión de Rebeca Carranco sobre la afición por el true crime y la crónica negra en el mundo audiovisual y en el audio. " Los sucesos son un negocio lucrativo, que llenan horas de informativos, páginas de diarios, y centenares de productos audiovisuales sin que las audiencias amaguen con cansarse. Bucles infinitos de polémicas en las que la verdad es un elemento colateral". Por cierto, hablando de true crime, esta entrevista de Tomàs Delclós a Carles Port, uno de los máximos exponentes del género en España.
Los compañeros de México asistieron a unas jornadas organizadas por Netflix sobre el estado de la industria audiovisual en el país. Se habló de diversidad, de descentralización de la producción, sobre la figura del showrunner, y sobre preocuparse menos por la cantidad y más por la calidad.
Fuera de EL PAÍS y en otro orden de cosas, de hace unas semanas es este artículo de Variety que recoge un estudio de una consultora según el cual los hogares estadounidenses pagan 61 dólares al mes por cuatro plataformas de vídeo de media. Es una subida del 27% respecto a los 48 dólares mensuales de media que pagaban el año pasado. La subida de precios de las plataformas fue tema de un boletín hace unos meses que podéis recuperar aquí. Volviendo al estudio estadounidense, para el 36% de los encuestados, el contenido disponible en esas plataformas no está a la altura del precio que se paga por verlo. El 47% respondió que pasarían más tiempo en las plataformas si el contenido fuera más fácil de encontrar, y más de la mitad de los encuestados de las generaciones más jóvenes dijeron que obtienen mejores recomendaciones en las redes sociales que directamente en las plataformas. | | | | | |
La sugerencia de la Redacción | | | Pol López y Roberto Gutiérrez, en 'Nos vemos en otra vida'. / DISNEY+ | Esta semana me acompaña Alejandro Prado, compañero de la Mesa de Edición. | | | Lo de maratonear series no va conmigo. Cuando aparecen los créditos suelo apagar antes de que se reproduzca automáticamente el siguiente episodio. Soy paciente para eso. Basta decir que, por motivos que no vienen a cuento, tengo pendiente el último capítulo de Succession desde hace muchos meses. Pero el pasado fin de semana me vi de dos tacadas la serie Nos vemos en otra vida (Disney+). No es ninguna proeza, son seis episodios de 40 minutos cada uno, pero para mis estándares no está nada mal. La serie está basada en el libro Nos vemos en esta vida o en la otra, de Manuel Jabois, que cuenta la historia de Gabriel Montoya, alias Baby (léase Babi), el único menor condenado por los atentados del 11-M, y su relación con José Emilio Suárez Trashorras, el infame minero asturiano que vendió la dinamita a los terroristas. En su momento devoraba las crónicas del macrojuicio que escribió Pablo Ordaz y me hice una idea de Tashorras: el típico buscavidas sin escrúpulos e inconsciente que vendería a su madre. Pero la serie nos descubre a un personaje caricaturesco, excesivo en todo, con una esquizofrenia agravada por el consumo de drogas y que se creía impune en su universo de trapicheos, rayas y confidencias policiales. Nos vemos en otra vida merece mucho la pena, se me hizo corta, pero cuando acabó el último capítulo me entraron ganas de ver algo de Los Serrano, tal como hice esa noche del 11 de marzo de 2004, para intentar evadirme mínimamente del horror vivido. | | | | Las sugerencias de los lectores | | | Cosmo Jarvis y Anna Sawai, en 'Shogun'. / KATIE YU (FX) | Leti Mena: "Hemos descubierto The Bear (Disney+). No me enganchó demasiado, pero en cambio Tokyo Vice (HBO Max) me fascinó. La realidad supera la ficción. Otra serie por la que pagaré una plataforma por un tiempo es The New Look (Apple TV+). Por supuesto que vimos Cristóbal Balenciaga (Disney+), y nos encantó. Y estamos viendo la primera temporada de Feud (HBO Max). ¡Extraordinaria! Y sus protagonistas, dos monstruos sagrados: Jessica Lange y Susan Sarandon. Estas tres últimas no son para todos los públicos. De Netflix no nos enganchó El problema de los tres cuerpos, me dio mucha pereza tanta complicación. Pero Ripley (Netflix) se lleva una gran admiración".
Juan Carlos Martín: "Desde mi última recomendación he visto un puñado de series, pero hay dos que me han entusiasmado. Shōgun (Disney+) está ambientada en el Japón del siglo XVII, a donde va a parar un corsario con su tripulación. Además, hay una lucha de poder entre los propios japoneses que no tiene nada que envidiar a Juego de tronos. La trama es hipnótica. Las interpretaciones son magníficas, con especial mención al señor feudal (Toranaga), la esposa de uno de sus vasallos que hace de traductora (Lady Mariko) y el inglés (el anjin John Blackthorne). La ambientación y los decorados son superrealistas. Los efectos especiales son fantásticos. La otra serie es El problema de los tres cuerpos (Netflix). Siempre me ha gustado la hard Sci-Fi. Pero tampoco hay que tener grandes conocimientos científicos para disfrutarla. Me ha gustado todo. El guion es fantástico. Los diálogos son para disfrutar. Uno nunca sabe qué va a deparar el siguiente capítulo, sobre todo al principio. El guion empieza con relatos en el presente y en el pasado que parece que no tienen nada que ver, con personajes que al principio no se entiende cómo pueden encajar. Pero lo hacen, vaya si lo hacen. Se han dejado la pasta en los efectos especiales, de lo mejor que he visto. Atención al capítulo cinco. Y ojo a la música, que acompaña perfectamente a las imágenes. ¿Tiene alguna cosa mala? Definitivamente sí, que la primera temporada solo tiene ocho capítulos.
Podéis mandar vuestras sugerencias televisivas (programas, series, documentales...) a nmarcos@elpais.es. Incluid, por favor, vuestro nombre, qué recomendáis y por qué lo hacéis en un párrafo. ¡Gracias! | | | | Series destacadas de esta semana | | | - Anatomía de Grey. 20ª temporada del dramasobre las vidas profesionales y personales de los trabajadores del Grey Sloan Memorial Hospital. Jueves 25 en Disney+.
- Los detectives muertos. Dos fantasmas adolescentes forman equipo con una médium para resolver misterios. Jueves 25 en Netflix.
- Them: The Scare. La segunda temporada de la serie de terror está ambientada en 1991, cuando una policía trata de detener a un asesino. Jueves 25 en Amazon Prime Video.
- El caso Asunta. Ficción sobre la investigación policial y el juicio por el asesinato de la niña Asunta Basterra, del que fueron culpados sus padres. Viernes 26 en Netflix.
- Beguinas. En el siglo XVI, una joven que acaba de comprometerse con un noble, se introduce en un mundo desconocido y lo arriesgará todo por amor. Domingo 28 en Atresplayer.
- Davos 1917. Thriller de espías suizo en el que una joven enfermera es reclutada por una maestra durante la Primera Guerra Mundial. Martes 30 en Filmin.
- Acapulco. En la tercera temporada, el Máximo adulto regresa a Las Colinas y el Máximo joven continúa su ascenso. Miércoles 1 en Apple TV+.
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Cinco artículos que no deberías perderte en Televisión en EL PAÍS | |
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| | NATALIA MARCOS
| Redactora de la sección de Televisión. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS, donde trabajó en Participación y Redes Sociales. Desde su fundación, escribe en el blog de series Quinta Temporada. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y en Filología Hispánica por la UNED. | | | | |
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